Leiomioma
El leiomioma es un tumor (crecimiento) benigno de la piel, derivado de células del músculo liso.
Este se puede originar del musculo que se encuentra en el folículo piloso (sitio de nacimiento del pelo) y se le da el nombre de piloleiomioma, también se puede encontrar en areolas o pezones, en los órganos genitales, escroto o vulva, llamándose leiomioma genital, o bien, puede originarse del músculo que se encuentra en los vasos sanguíneos donde toma el nombre de agioleiomioma.
En cuanto a su aparición existe una prevalencia superior en las mujeres. La mayoría son adquiridos (aparecen años después del nacimiento) y aislados (no se relacionan a otras enfermedades).
También se ha descrito asociación familiar, es el caso de la leiomiomatosis familiar en la cual además de leiomiomas en la piel se presentan miomas uterinos. Algunas de estas pacientes incluso tienen mayor riesgo de desarrollar cáncer de células renales.
Las lesiones típicas son pápulas (elevación menor de 0.5cm) o nódulos (elevación mayor de 0,5cm) redondeadas, de tamaño que puede variar de pocos milímetros a un centímetro, de color rojizo - marrón y de consistencia firme. Comúnmente se encuentran múltiples lesiones que se unen para formar placas o adquieren distribución lineal. Las localizaciones más frecuentes son las regiones extensoras de las extremidades, el tronco, y regiones laterales de cara y cuello.
Los leiomiomas genitales usualmente son asintomáticos y solitarios y ocasionalmente son pedunculados, los angioleiomiomas se presentan como nódulos dolorosos, solitarios, más frecuentes en mujeres y localizados en las piernas. Algunos pacientes con lesiones múltiples presentan dolor que puede ser espontáneo o secundario a la presión local o a factores emocionales, si esta es la queja principal del paciente el dermatólogo puede iniciar manejo analgésico.
Los leiomiomas no resuelven espontáneamente y no parecen tener riesgo de malignidad, retirarlos quirúrgicamente puede ser el manejo en caso de presentar dolor o compromiso cosmético pero tienden a reaparecer.
Artículo escrito por: Doctora Ana Cecilia Martínez I. MD